sábado, 22 de noviembre de 2008

Hundido yo estaba, ahogado en soledad. Mi corazón lloraba de un vacío total. Todo lo intenté, por donde quiera te busqué. Eras tu mi necesidad. Triste y desolado, ya no pude soportar. Mas desesperado era imposible de estar. Todo lo intenté, por donde quieras te busqué, eras tu mi necesidad. Alcé mi rostro y llegaste tu y todo cambió. Llegaste tu, la esperanza triunfo. Llegaste tu y volví a nacer.